viernes, 16 de mayo de 2014

INTRODUCCION A LOS NEGOCIOS POR INTERNET parte I

Que implica estar en línea


Nociones básicas.


Hagamos memoria. En 1992, Internet todavía era un lugar tranquilo. No se podía hacer mucho más que mandar y recibir e-mails, bajar software con FTP (protocolo de transferencia de archivos) o chatear con IRC (Internet relay Chat). Estaban de moda programas tales como "Archie" y "Gopher", y para usar Internet había que saber mucho de unix. En ese momento, solo se contaba con una terminal de texto ASCII conectada por telnet a una estación de trabajo Apollo de HP. No se tenía navegador Web porque no se había inventado. Existían también otras redes informáticas, como FIDONET, entonces mucho más interesantes que Internet dado que tenían una interfaz de usuario colorida.


Actualmente enciendo mi computadora portátil y me conecto con Internet mediante un navegador Web, ya sea por medio de la LAN (red de área local) desde el trabajo o por el MODEM desde mi casa, y se puede hacer todo lo que se hacía en 1992 y más.


Este navegador fácil de usar me permite conectarme por emails, cargar y bajar software, chatear en Línea y hacer búsquedas en Internet, como también controlar mi cuenta bancaria y compras chocolates en el súper. A todos estos servicios se accede con el mismo software.


A esta altura, el programa es tan sencillo de utilizar que incluso aquellos que no poseen conocimientos técnicos tienen su dirección de e-mails y compran o venden en línea. No hay cifras exactas con respecto a Internet; no se sabe cuántas personas u organizaciones están on-Line. Esto se debe a que la estructura de Internet no se parece a nada, por lo cual ya no sirven los métodos tradicionales para medir audiencias. Para todos los demás medios masivos de comunicación, la cantidad de ofertas está limitada por región, por ejemplo 40 canales de televisión o cinco grandes diarios en toda Toscana (Italia).


Por primera vez en la historia de la humanidad, un medio masivo de comunicación tiene más ofertas que usuarios potenciales. Pero además, por primera vez, todos podemos interactuar. Cualquiera tiene la posibilidad de cambiar los contenidos, agregar información. Con la televisión hay un total de canales, mientras que con


Internet los usuarios cuentan con sus propios canales y se mueven por el ciberespacio según el ritmo y el objetivo de cada uno, dejándose llevar únicamente por su interés y curiosidad.



En cuestión de unos pocos años, todo el mundo estará presente en el Internet. El miedo que remplace la vida real es infundado; así como la televisión no reemplazo a la radio ni a los libros, el mundo cibernético no ocupara el mundo real, si bien no hay duda de que aportará una nueva dimensión a la vida humana. El sueño de la aldea global finalmente se hará realidad.