miércoles, 29 de septiembre de 2021

Análisis de Teorías de Inversión en la Bolsa Capítulo 1: LAS TEORÍAS DEL COMPORTAMIENTO DEL MERCADO 1.5. La teoría de Ii onda Elliot.

Capítulo 1: LAS TEORÍAS DEL COMPORTAMIENTO DEL MERCADO 

1.5. La teoría de Ii onda Elliot 

1.5.1. El personaje, su legado 

  1. Elliott vivió y murió en la ciudad de Nueva York, donde desempeñó trabajos de carácter administrativo y contable. Durante toda su vida mostró una insaciable curiosidad por una amplia gama de asuntos. No fue hasta que cumplió la edad de sesenta y cinco cuando empezó a interesarse por el estudio de las teorías que describen los mercados financieros. Su Teoría de la Onda, que se dio a conocer en una serie de artículos publicados en mil novecientos treinta nueve por una modesta revista denominada Financial World, fue desarrollada mientras estudiaba las ideas de Dow. 

  2. Era una persona que exponía sus ideas de modo autoritario, mostrando poca paciencia con quién no le entendía rápidamente. Su actitud hacia sus semejantes escondía un profundo temor: que su trabajo se perdiera. Consiguió un único seguidor, un importante analista financiero llamado Hamilton Bolton socio del Bank Credit Analyst, que introdujo su método en un reducido ambiente profesional que lo conservó permitiendo que saliera a la luz pública en el momento adecuado. Ese instante llegó en los años ochenta cuando Robert Pretchter, un joven analista de Merrill Lynch, la descubrió para sí mismo, para el gran público y el mundo académico. 

1.5.2. La teoría de la Onda Elliot. 

  1. Elliot relaciona el precio de los valores con el tiempo gráficamente por medio de dos ejes, uno horizontal donde mide el tiempo; y otro vertical, donde representa el precio de los valores. Cada dato es registrado en su momento y es unido mediante una línea que comienza donde acaba la anterior. A estos trazos continuos los denomina ondas, que pueden ser ascendentes o descendentes, y todas forman parte de otras más grandes y son divisibles en varias más pequeñas. Cuanto más se prolongan en el tiempo mayor categoría se les debe asignar. Los movimientos del mercado se pueden descomponer en dos clases de ondas impulsoras y correctoras. A su vez cada onda impulsora, denominada de esta forma porque el último dato está situado a mayor altura que el primero, se descompone en cinco ondas de la siguiente forma: la primera sube, la segunda baja, la tercera sube, la cuarta baja y la quinta sube. Se las llama uno, dos, tres, cuatro y cinco. La onda correctiva se divide en tres: la sexta onda baja, la séptima sube y la octava baja, quedando a menor altura que el punto de partida. Son conocidas como A, 8 y C. La segunda corrige a la primera, la cuarta a la tercera, la séptima a la sexta, quedando la quinta y la octava sin corrección alguna. 

  2. Entre el punto inicial y el final el gráfico toma la forma de una V invertida formando lo que se denomina un canal de tendencia, que podrá ser ascendente, cuando el segundo brazo de la y está situado por encima del primero; o descendente, al situarse el referido punto por debajo, pudiendo quedar igualados evidenciando una ausencia de variación entre los dos instantes referidos. El modelo básico de Elliot, puede estar contenido dentro de una tendencia ascendente, descendente o quizá horizontal. 

  3. La nomenclatura utilizada por Elliot para nombrar a las ondas es confUsa, es sólo orientativa porque no tienen una duración exacta, de menor a mayor serían las siguientes: onda minuette, onda minuto, onda menor, onda intermedia, onda principal, ciclo, superciclo y gran superciclo. Basarse en una o en otra depende del plazo del pronóstico que se quiere realizar. 

  4. Toda onda es divisible en otras y a su vez se integra en otras de mayor categoría. La onda número uno, es la más corta de las que constituyen la onda impulsora. Su identificación es difícil pues, puede confundirse con alguna división de la onda c del ciclo anterior Es divisible en cinco ondas: la uno, dos ,tres,cuatro y cinco. La onda número dos correctora de la primera, no alcanza el valor mínimo donde se inició la número uno. Es susceptible de división en tres ondas a, b, c. 

  5. La número tres es de carácter impulsor y la más larga de entre éstas, es posible dividirla en cinco ondas. La cuatro corrige la onda alcista anterior. Generalmente su mínimo se suele encontrar cerca del máximo de la número uno y es muy cercano al mínimo alcanzado por la número cuatro del ciclo anterior. Se podría desagregar en tres ondas a, b y c. La quinta es impulsora, más corta que la tercera, aunque puede superarla, pudiendo ser dividida en otras cinco. Se recomienda vender en la cima de la número uno o en la de la tres, esperar a hacerlo encima de la cinco es muy arriesgado porque comienza la onda correctiva y cualquier retraso supondrá pérdidas. 

  6. Las ondas correctivas A, 8 y C, también se pueden subdividir en otras. La A es impulsora, porque estamos en la fase descendente del ciclo, y por lo tanto será divisible en cinco que siguen la primera parte del modelo. La 8 es ascendente, pero es correctora de la A, y por lo tanto susceptible de ser desagregada en tres que serían similares a la onda descendente de Elliot. La C es descendente, es impulsora del movimiento a la baja y por lo tanto se dividirá en cinco. 

  7. Las ondas impulsoras siguen la regla de igualdad que dice que cuanto mayor es la categoría de las ondas, más parecidas serán en todos sus aspectos. Si una ha avanzado un cien por cien en diez años, la onda impulsora posterior hará lo mismo en la siguiente década, lo que no implica que ambas sean consecutivas. Las ondas que tienden a parecerse son las siguientes: la 1 con la tres, la 1 con la cinco, La 1 con la A, la 1 con la C, la 3 con la 5, la 3 con la A, la 3 con la C, la 5 con la A, la 5 con la la A con la C. 

  8. Las ondas correctivas como su nombre indica corrigen a las ondas impulsoras. Cada una de ellas consta de una onda bajista A, seguida de una onda alcista B y termina en una bajista C. Las ondas correctivas adoptan varios modelos, los más frecuentes son los siguientes: la corrección es simple cuando los tramos A y C son de igual longitud y el tramo C es más corto, la corrección plana se da cuando la longitud de todos los tramos es la misma, se denomina irregular cuando todos los tramos son distintos; y triangular cuando A es mayor o menor que B, y a su vez B es mayor o menor que C. Todas las bajistas se subdividen en tres ondas, y las alcistas en cinco. Las ondas correctivas siguen la regla de alternancia que dice: que si una onda correctiva es simple, la siguiente será compleja y viceversa. Aunque no existe una definición demasiado exacta de lo que se entiende por una onda compleja o simple, debiendo entender que se refiere a su duración. 

  9. Además de los dos tipos de ondas mencionados existe otra clase llamada onda X, que a pesar de no ser el nombre que Elliot le asignó ha terminado siendo conocida así. No es más que una separación entre dos ondas correctivas idénticas, podrá adoptar cualquier forma pero constará de tres tramos que terminarán a la misma altura que comenzaron. Luego tendremos tres grupos a, b y c, de los que el primero y el último serán iguales, pudiendo el grupo a, b y c del medio tener cualquier forma. También es posible encontrar dos ondas X. Tendríamos cinco grupos a, b y c, de los que los numerados uno, tres y cinco serían iguales; y el número dos y el cuatro, distintos. A todos los efectos la existencia de una onda X no altera la cuenta, pero dificulta la identificación de las subdivisiones de las ondas correctivas y el reconocimiento de las ondas principales. 

  10. Otro aspecto a considerar es la relación existente entre las distintas ondas, que se rige por la denominada secuencia de Fibonacci. Este es el nombre por el que era conocido Leonardo de Pisa, un matemático italiano del siglo XVIII, que planteó una secuencia de números en la que cada uno de ellos es la suma de los anteriores. La relación existente entre cada uno de ellos y el inmediatamente anterior se denomina Phi y equivale a 1,618, exceptuando la de los cuatro primeros. A través de este mecanismo es posible descubrir la evolución del precio de los valores que está sujeta en todos sus elementos a las propiedades que se desprenden de esta secuencia. 

  11. El papel que juega el tiempo en la teoría de Elliot nos hará comprender mejor algunas partes de su descripción del mercado. El precio de los valores sigue un comportamiento cíclico independientemente del período de tiempo estudiado. El patrón de comportamiento se da en intervalos de tiempo tan breves como unos pocos segundos y tan amplios como para abarcar varios siglos. Un ciclo que dura unos breves segundos, se íntegra en otro que termina en unos minutos, así hasta abarcar espacios de tiempo más largos. 

  12. Hasta el momento hemos analizado el comportamiento del mercado según este modelo enunciado por Elliot. No Podemos denominar teoría porque sólo se refiere al cómo, nunca al porqué de este comportamiento que paso a referirles a continuación. La explicación de la forma en que se comporta el mercado es la disposición psicológica de los inversores; su optimismo o pesimismo. El estado de ánimo de las personas es cíclico, hecho que se refleja en los mercados de forma simultánea. Existe sincronicidad en la oscilación de los precios y entre la euforia o la depresión. Esta sorprendente conclusión puede interpretarse de tres formas distintas: el estado de ánimo influye en los precios, los precios influyen en el estado de ánimo; o son interdependientes. Nadie ha comprobado que alguna de las tres sea más verdadera o más falsa que las dos restantes. La tercera, es una tautología y es, por lo tanto, indemostrable o, lo que sería lo mismo, siempre cierta. Por eso el autor, sencillamente recomienda que además de realizar el estudio técnico, se observe el comportamiento de quienes operan en el mercado. Debido a esta característica de su método, el autor recomienda retirarse del mercado en circunstancias extraordinarias o cuando se conozca que está dominado por personas que normalmente no operan en el mismo. 

Otro aspecto a resaltar de esta teoría, es el que se refiere al hecho de que la teoría no es aplicable para un sólo valor. Está diseñada para un conjunto, porque el precio de un título puede verse muy influido por multitud de factores económicos que no están sincronizados con la disposición psicológica de los inversores.