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jueves, 7 de octubre de 2021

Análisis fundamental y bursátil: Cuenta de resultados (II)

ANÁLISIS FUNDAMENTAL Y BURSÁTIL 


Análisis fundamental y bursátil: Cuenta de resultados (II)  

Iniciamos la semana pasada el estudio de la cuenta de resultados, estudiando la  estructura de la misma, desglosando en tres partes. Cuenta de explotación, cuenta de  resultados extraordinarios y cuenta de resultados de la cartera de valores. Así mismo  analizamos la cuenta de explotación y ahora pasaremos a estudiar las otras partes de la  cuenta de resultados.  

Cuenta de resultados extraordinarios  

La cuenta de explotación muestra los beneficios que obtiene la empresa en su actividad  normal o típica, pero además la empresa puede tener beneficios o pérdidas en otras  actividades que no constituyen su actividad normal, como la venta de edificios o terrenos  que no utiliza, operaciones en bolsa, inversiones en actividades no relacionadas con su  actividad, etc. Las inversiones en bolsa y demás mercados financieros se reflejan en la  cuenta de resultados de la cartera de valores, y el resto de actividades “atípicas” en la  cuenta de resultados extraordinarios.  

La cuenta de resultados extraordinarios refleja el beneficio o la pérdida que obtiene la  empresa en operaciones independientes de su propia actividad. Los beneficios obtenidos a  través de esta cuenta son los conocidos “beneficios atípicos” y en muchas ocasiones se  ha usado para enmascarar los malos resultados obtenidos a través de la explotación normal  o típica de la empresa. De esta forma una empresa que incurra en pérdidas a través de la  explotación normal de su negocio, puede igualar los resultados totales de años anteriores a  base de la cuenta de resultados extraordinarios, obteniendo beneficios a través de la venta  de activos de la compañía (terrenos, sucursales, inmuebles, etc.).  

Pero este incremento de los beneficios se consigue a costa de disminuir el patrimonio de  la empresa, por lo que puede tener graves consecuencias a medio plazo. Incluso si se aplica  de forma reiterativa o abusiva puede finalizar descapitalizando a la empresa y restarle los  fondos necesarios para financiar nuevas actividades empresariales. 

Cuenta de resultados de la cartera de valores  

Por último, y dentro de la estructura de la cuenta de resultados, nos referimos a la cuenta  de resultados de la cartera de valores, que refleja el beneficio o las pérdidas que obtiene la  empresa en operaciones de su cartera de valores. En estas operaciones están incluidos,  tanto los valores propios como los de otras sociedades.  

Es lógico y deseable que la empresa obtenga beneficios financieros con su cartera de  valores, pero al igual que con la cuenta de resultados extraordinarios, no se puede aceptar  que estos beneficios disimulan las pérdidas padecidas en la actividad normal de la empresa,  reflejada en la cuenta de explotación. Esta cuenta solo debe ser una ayuda financiera a los  beneficios normales obtenidos por la empresa.  

Análisis por porcentajes y análisis por ratios  

Hay dos técnicas fundamentales en el análisis fundamental, que son el análisis por  porcentajes y el análisis por ratios. En general el análisis por porcentajes se aplica cuando  se comparan dos empresas entre sí, para determinar las diferencias entre ambas.  

El análisis por porcentajes se basa en el estudio de las cifras del balance y de la cuenta  de resultados, pero tomándose como porcentajes del activo total en el caso del balance y  como porcentajes de las ventas totales en la cuenta de resultados. Este sistema permite  comparar empresas de diferentes tamaños y también las cifras contables de una empresa a  lo largo del tiempo.  

El análisis por ratios se basa en el estudio y comparación de los diferentes ratios o  relaciones, que se deducen de los balances y cuentas de resultados de la empresa. Los  ratios se suelen clasificar en ratios de actividades, ratios de liquidez de solvencia y ratios de  rentabilidad.  

Resumen de conceptos básicos  

Pero antes de iniciar el análisis de ratios, revisaremos los conceptos básicos del análisis del  balance y de la cuenta de resultados, algunos ya los hemos repasado al finalizar el estudio  del balance, pero otros son nuevos y se usan específicamente en el análisis por ratios.  

Activo: Parte del balance que recoge todo lo que la empresa posee.  

Pasivo: Parte del balance que recoge lo que la empresa debe a las entidades  externas y a los accionistas.  

Activo circulante: Elementos del activo que se consumen en el ciclo normal  de producción y no constituyen patrimonio de la misma. Dentro del activo  circulante se encuentra el activo disponible que es el activo más líquido que  se puede disponer inmediatamente.  

Pasivo circulante: Deudas a corto plazo, que deben pagarse en el tiempo que  dura el ciclo normal de producción.  

Activos inmovilizado: Activo que se utiliza durante un largo periodo de  tiempo y no se consume en el ciclo productivo.  

Fondo de maniobra: Es el activo circulante menos el pasivo circulante.  

Fondo de los accionistas: Capital que se ha formado cuando se fundó la  empresa y posteriores ampliaciones de capital.  

Pasivo fijo: Medios de financiación que tiene la empresa a largo plazo.  

Capital total empleado: Deuda financiera, accionistas minoritarios y fondos  de los accionistas.  

Beneficio bruto: Ventas netas menos el precio de coste de estas ventas. 26