Características de la comunicación asertiva
La expresión de opiniones y peticiones en forma ambigua e indirecta hace
que la comunicación se distorsione y sea ineficaz, pues crea confusión para
quien escucha, al no saber exactamente a que se está refiriendo; y frustración
para quien se manifiesta, si su interlocutor no logra adivinar o caer en cuenta
de la intención del mensaje. Ejemplo: una persona puede decirle a otra, ¿Sabías
que están presentando una excelente
película cerca de aquí? Cuando realmente lo quiere decir es (Deseo que
vayamos juntos a el cine) la comunicación directa facilita una comunicación
oportuna.
Es honesta
No es un arma para manipular sutilmente, se trata más bien de
expresiones y acciones auténticas sin minimizarse a sí mismo o a los demás,
algunas situaciones que evidencian la falta de honestidad son:
- Decir o hacer lo que otros esperan para obtener
beneficios personales.
- Adular a los demás para que se haga lo que otra
persona quiere que se haga.
- Decir todo lo que se cruce por la mente
colocándose a sí mismo por debajo. Ejemplo, (gracias por invitarme a el coctel)
(nunca había ido a uno y me moría de ganas por asistir)
- Decir todo lo que se piensa en aras de
la sinceridad y la franqueza descuidando como esto puede afectar al
otro Ejemplo: (francamente creo que este empleo es muy complejo para ti,
busca algo acorde a tus
capacidades).
- En ocasiones las personas que tienen deficiencias
para expresar abiertamente lo que sienten, utilizan frases hostiles para
encubrir sentimientos como preocupación, temor e incluso afecto,
provocando en los demás un efecto contrario al que esperaba Ejemplo: (muy
buena tu vida no) ¡ yo todo lo que me he sacrificado por ti y mira con lo
que resultas.
Es apropiada
Tiene en cuenta el contexto particular, esto es, el lugar, el momento
oportuno, el tipo de relación que exista con la persona. Por ejemplo, hacer un
reclamo a un compañero de trabajo, estando muy alterado y cuando éste se
encuentra ocupado en su oficina atendiendo artos clientes, no es ni un lugar ni
un momento apropiado para ninguno de los dos lo apropiado en la asertividad
indica que las variaciones en la forma de decir las cosas depende de las
relaciones que se establezcan con las personas. No será lo mismo negarse a una
invitación a almorzar, de un compañero de trabajo que apenas se conoce, a
decírselo a la pareja con quien existe una forma de comunicación particular y
única.
Es congruente
La concordancia entre los mensajes verbales y no verbales es de vital
importancia porque determina la efectividad de la comunicación y dice de la
forma como las personas se relacionan entre sí. La postura del cuerpo, mirada,
gestos faciales, pueden descalificar lo transmitido con palabras y convertirse
incluso en una manifestación agresiva. Decir, (estoy muy feliz) con voz
sarcástica, con una sonrisa congelada y la expresión facial tensa, no solo
resulta incongruente sino que genera en quien escucha, desconcierto e indisposición,
lo que probable mente concluya en deterioro de la interacción entre la dos
personas
Comportamientos asertivos y no asertivos
La teoría de la asertividad establece diferencias entre los
comportamientos activos y los que no los son. Estos últimos se refieren a la sumisión o pasividad y
hostilidad y agresión. Las descripciones de estas tres tipificaciones son
puntos extremos en el continuo comportamiento, sin embargo en la realidad, este
puede tener mil matices.
- Sumiso
- Asertivo
- Agresivo
Esta teoría no tiene como fin rotular a las personas ni significa que
existan algunas cuyo comportamiento sea totalmente pasivo, agresivo o asertivo.
Una persona puede tender a actuar en el trabajo, bajo ciertas circunstancias en
forma sumisa, con una deliberada intención adaptativa; con mayor frecuencia ser asertivo con su grupo de
amigos y en ocasiones, indiferente o sarcástico (agresivo) con su pareja, en
situaciones de conflicto conyugal.
El comportamiento individual no puede esteriotiparse estrictamente de
una u otra forma. Es necesario tener en cuenta que la variación sutil de los
matices puede responder a la intensidad, frecuencia, circunstancias, contexto,
características personales, etc. Esta fluctuación en las acciones de una
persona, es equiparable a la que registra el equalizador de un equipo de sonido
que capta desde los más bruscos a los más leves e imperceptibles cambios en el
sonido.
Así mismo el comportamiento del ser humano es dinámico y cambiante. La
forma de actuar hoy, no es igual a la de tiempo atrás, y dado que la naturaleza
humana es compleja, tampoco es posible predecir cómo actuaría una persona si
las condiciones internas o externas se modifican. Por estas razones los
siguientes indicadores deberán tomarse sólo como tendencias en la conducta
humana y ser considerados en la integración que envuelve lo que se dice con
palabras y lo que se expresa corporalmente.