Las
ventajas más evidentes de la implantación del marketing corporativo
dentro de la empresa son:
- Crear una identidad corporativa, o lo que es lo mismo, una personalidad y una filosofía propias, que se reflejan en cada una de las acciones de los colaboradores y en cada elemento de comunicación de la empresa.
- Definir la cultura de empresa hacia adentro, con el fin de establecer hábitos de trabajo estandarizados que permitan obtener mayores réditos con la misma fuerza laboral.
- Volcar, a través de un sistema gráfico, visual y de estilo, esa filosofía, esa personalidad y esa cultura, para transmitirla y difundirla entre todos sus públicos (internos y externos).
- Regular el ámbito laboral para mantener un clima de confianza y motivación.
- Dar voz y crear consenso entre los colaboradores de la empresa.
- Posibilitar que los mandos superiores recojan el feedback, las ideas y la creatividad de los cargos inferiores.
- Permitir que todos los empleados conozcan mejor sus posibilidades reales de futuro en la empresa y, de esa manera, pueda canalizar mejor sus inquietudes.
- Poder controlar situaciones de crisis.
- Promover la comunicación entre todas las escalas.
Todo
esto persigue un único y gran objetivo: que todos y cada uno de los
colaboradores de la empresa se identifiquen plenamente con ella y le
rindan fidelidad. Que se “casen” con ella.
Entender
que el marketing tiene tanta importancia fuera como dentro de la
organización es dar un paso adelante, una manera de derribar
prejuicios, enfrentarse a la autocrítica y atreverse a innovar.
Porque hoy el marketing es a la empresa lo que el corazón a los
humanos: su fuerza impulsora.
Por
todo esto, el marketing corporativo es mucho más que comunicación.
Su meta también es ser la base que regule la gestión de los
recursos humanos, la aplicación de técnicas para mantener alta la
motivación, la correcta gestión de la información, la provisión
de herramientas para lograr comunicación efectivas o la disposición
de cursos de formación, entre muchas otras funciones que cada día
se suman a una disciplina en expansión.
Al
ser tareas que realizan varios departamentos de forma independiente,
pero que persiguen un mismo objetivo, es vital que exista una
coordinación y un control estricto de todo lo que se emite. Esta
tarea le corresponde al departamento de comunicación de la empresa.
A
continuación se ofrecen pautas para aplicar esta disciplina a lo
práctico, al día a día de los colaboradores. Pautas para que el
marketing interno sea el verdadero motor de toda empresa.
Herramientas
y recursos del marketing corporativo
La
unidad de trabajo en una empresa es la información. Es lo que la
alimenta diariamente para que pueda funcionar, la materia prima para
una efectiva toma de decisiones y es el factor más importante tanto
para el éxito en los negocios como para una adecuada motivación de
los colaboradores.
Una
buena gestión de la información favorece la obtención de los
objetivos que la empresa se traza anualmente. Todos los colaboradores
de la empresa necesitan de ella para poder realizar su trabajo
diario. Por eso, tenerla a mano, saber dónde buscar y contar con las
herramientas adecuadas favorecen una mejor consecución de
resultados.
Hay
que tratar de no caer en el error de que “información” lo es
todo. Son los sucesos de relevancia cuya comunicación a un grupo de
individuos puede ser de interés, ya sea para una toma de decisiones
o para conocer la situación del entorno. Discriminar qué es
información y qué no –para luego comunicarla al público
correspondiente– es una buena manera de comenzar a administrar la
información dentro del contexto de la empresa.
Para
identificar qué es información y qué no, se puede clasificar la
finalidad que persigue. Puede producirse por interés propio, por
ejemplo para dar a entender una determinada imagen en su entorno, o
por exigencias impuestas, formales o no, por los agentes económicos
que tiene intereses en la empresa. Dentro de este último epígrafe
podríamos incluir:
- Información obligatoria económico-financiera.
- Información institucional hacia agentes con los que opera, tales como entidades financieras, accionistas, proveedores, etc.
- En cuanto a la información derivada del propio interés en establecer una imagen, podríamos considerar:
- Las actividades de relaciones públicas.
- La publicidad y la promoción en el ámbito de marketing, tanto la comunicación a nivel interno.