martes, 30 de noviembre de 2021

Guías Análisis Técnico Parte 2 Pautas Gráficas

Guías Análisis Técnico 

2. Pautas gráficas 

2.1. Gráficos

2.1.1 Tipos de gráficos 

La principal herramienta de trabajo del analista técnico son los gráficos. Existen muchos  tipos de gráficos y todos y cada uno de ellos tienen como finalidad reflejar los precios de  cada día para poder determinar los movimientos futuros de cada valor. ∙ 

  1. Gráfico de líneas. 

  2. Gráfico de barras 

  3. Gráfico de punto y figura. 

  4. Gráfico japonés "vela" o candlestick. 

El análisis técnico debe examinar la evolución histórica de los precios bursátiles para  extraer la relación directa que existe entre los movimientos del precio en el pasado y  aquellos que tendrán lugar en el futuro. El instrumento primario para ello son los gráficos,  definidos por Stan Weinsten como "...cardiogramas relativos a la salud del mercado". Dentro de los diferentes tipos de gráficos existentes se destacan seguidamente las  características de aquellos más utilizados. 

Gráfico de líneas 

Su construcción es muy sencilla: se sitúan los precios en el eje vertical, el tiempo en el  eje horizontal y, por cada unidad de tiempo, se levanta una recta vertical hasta la altura  del precio correspondiente. Registra con facilidad los precios históricos de un título o índice a lo largo de una serie de  horas, días, semanas, meses o años, por lo que, frecuentemente, se utilizan como  auxiliares para la construcción de los gráficos de barras. Normalmente, el precio suele ser el de cierre, pero también puede ser el precio máximo,  mínimo o medio.

Gráfico de barras 

Se utilizan los tres precios más significativos de un determinado período (hora, día,  semana, mes o año): el máximo, el mínimo y el cierre, y se suele incluir también el precio  de apertura. 

En el eje de abscisas se representan el tiempo y en el eje de ordenadas el precio. Para cada unidad de tiempo se traza una recta vertical que comience en el precio mínimo  y termine en el máximo; el precio de cierre se señala sobre la recta vertical mediante una  pequeña barra orientada hacia la derecha y el de apertura, en su caso, de igual manera  pero con orientación hacia la izquierda. 

Gráfico de punto y figura 

  1. Registra los cambios en el precio siempre que sobrepasen un mínimo previamente  establecido, que sirve para distinguir los movimientos importantes de los que no lo son y  hacer así más fácil la identificación de tendencias. 

  2. El eje de abscisas carece de significado temporal. (Sólo refleja las sucesivas bajadas y  subidas del precio) y en el eje de ordenadas se sitúan los precios. Cuando la cotización  alcanza un determinado nivel, se anota un aspa en el plano y, mientras el título o índice siga registrando subidas que rebasen el mínimo preestablecido, se irán anotando aspas  sobre la misma línea. Si el cambio en el precio no supera ese mínimo, se ignora la  cotización de ese día, y si la nueva cotización supone un cambio en la tendencia, se  registra en la siguiente línea vertical a la derecha con un círculo

  3. Estos gráficos no informan sobre el tiempo que dura cada movimiento, ni consideran el  volumen de negociación, pero tienen la ventaja de representar la información relativa a  las variaciones de los precios de forma resumida; "Son básicamente, sumarios  compactos de la actuación". 

Gráfico japonés "vela" o "candlestick" 

  1. Aunque este tipo de gráfico fue creado por los japoneses hace más de tres siglos para  predecir los movimientos de los precios, hasta finales de la década de los ochenta no ha  captado la atención del análisis occidental. No se trata simplemente de una forma de  representar el comportamiento de las cotizaciones, sino que existe una auténtica teoría  sobre la diversidad de figuras que se pueden encontrar en este tipo de gráficos y sus  implicaciones de predicción. 

  2. En el eje de abscisas se representan el tiempo (hora, día, semana, mes o año) y en el eje  de ordenadas el precio. Este gráfico debe su nombre a que la línea que une el precio  máximo y el mínimo parece un candil con su cirio y su mecha. El cuerpo principal (parte  gruesa) de la línea representa el rango entre el precio de apertura y el de cierre del  período: si el precio de cierre es superior al de apertura, el cuerpo principal es blanco  (vacío), si es inferior al de la apertura, el cuerpo principal es negro (lleno) y si ambos  coinciden, entonces no existe cuerpo principal sino una raya horizontal y surge una figura  que recibe el nombre de "doji". Por encima y por debajo del cuerpo principal surgen unas  finas líneas llamadas sombras, que representan los precios máximo y mínimo del  período, respectivamente. 

  3. Por tanto, al igual que el gráfico de barras, representa para cada período los precios  máximo, mínimo, de cierre y de apertura, pero resalta la relación entre el precio de  apertura y el de cierre del período, haciendo más evidente la variación sufrida por la  cotización y, por tanto, el sentimiento implícito de los inversores.

2.1.2 Determinación de tendencia: canales, pullbacks, soportes y resistencias 

¿Qué es una tendencia? 

La tendencia es la dirección en que el mercado se mueve formando ondas sucesivas. Si  los senos y crestas de esas ondas son sucesivamente más altos, la tendencia es alcista,  mientras que si van en descenso la tendencia es bajista. También el precio puede oscilar  en un movimiento horizontal, con lo cual se define una tendencia lateral. 

Líneas y canales de tendencia 

  1. La línea de tendencia es el instrumento más utilizado por los analistas técnicos para  identificar tendencias y vueltas de tendencia. Consiste en unir los sucesivos mínimos  ascendentes de los retrocesos, si la tendencia es alcista, o los sucesivos máximos  descendentes de las recuperaciones, si la tendencia es bajista. 

  2. El significado técnico de la línea de tendencia aumenta con el número de puntos que  conecta y la cantidad de tiempo que persiste sin ser penetrada. Algunos analistas  piensan que también es importante el grado de inclinación, pues cuanto más horizontal  es la línea de tendencia, más elaborada y sostenida es la tendencia que representa y, por tanto, mayor es la importancia de una penetración de la misma, mientras que una línea  de tendencia escarpada suele romperse con facilidad y desarrollar breves movimientos  laterales de consolidación. 

  3. Una vez establecida la línea de tendencia, se trata de determinar la validez de una  ruptura de la misma. Hay que tener en cuenta la extensión de la penetración, es decir, los  precios deben moverse más allá de un determinado porcentaje, 3% normalmente, tras  atravesar la línea de tendencia. También se puede utilizar un filtro temporal, como exigir  que los precios cierren por encima de una línea de tendencia alcista o por debajo de una  línea de tendencia bajista durante dos días consecutivos. La validez de una penetración  aumenta si va acompañada de un volumen creciente, aunque no es condición  indispensable. 

  4. Cuando la línea de tendencia se ha roto, los precios se moverán, como mínimo, una  distancia igual a la vertical desde el alza máxima (baja mínima) de la tendencia rota hasta  la línea de tendencia, proyectada desde el punto de ruptura. Algunas veces, tras la vulneración de una línea de tendencia alcista, los precios  descienden un poco, se recuperan hasta llegar a la línea de tendencia que rompieron y,  más adelante, vuelven a caer (pullback). 

  5. Se puede trazar entonces una segunda línea de tendencia, que queda también rota y une  el mínimo donde comenzaba la primera línea de tendencia y el mínimo creado tras la  penetración de esa primera línea. Si tras la caída tiene lugar otro intento fallido de  recuperación, esta vez hasta la segunda línea de tendencia, se puede dibujar una tercera  línea de la misma forma. Algo similar ocurre en una tendencia bajista y, tanto en un caso como en otro, si se  produce una ruptura de la tercera línea de tendencia se obtiene una señal válida de  vuelta de tendencia, conocida como el principio del abanico.

  6. En muchas ocasiones, los precios se alejan repetidamente la misma distancia de la línea  de tendencia antes de volver a acercarse a ella y, por consiguiente, se puede trazar una  línea recta paralela a la línea de tendencia, que conecte las crestas en una tendencia  alcista o los senos en una tendencia bajista. Esta línea recibe el nombre de línea de  canal, ya que forma, junto con la línea de tendencia, un área similar a un canal dentro del  cual se mueven los precios. 

  7. Si los precios fallan al intentar alcanzar la línea de canal, se produce un vacío de  deterioro de la tendencia y posible ruptura de la línea de tendencia, mientras que si  superan la línea de canal, señalan un fortalecimiento de la tendencia existente. De las  dos líneas que forman el canal, la línea de tendencia es, con diferencia, la más importante  y digna de confianza para la determinación del movimiento del mercado. Cuando los precios vulneran alguno de los dos lados del canal recorren normalmente,  como mínimo, una distancia igual a la anchura del mismo.

Soportes y resistencias 

El soporte es un nivel de precio en el que existe una demanda suficientemente fuerte  para detener, al menos temporalmente, un movimiento bajista del precio, y posiblemente,  cambiar su dirección. En una tendencia bajista, los niveles de soporte, que van parando  los movimientos descendentes del precio, se van rompiendo repetidamente hasta que la  tendencia bajista cambia. 

La resistencia es un nivel de precio en el que la presión de venta supera a la presión de  compra, de forma que esa concentración de oferta detiene el avance del precio durante  un tiempo y provoca un giro hacia abajo. En una tendencia alcista, los niveles de  resistencia que ofrecen paradas temporales a los movimientos ascendentes del precio  van siendo sobrepasados sucesivamente hasta que se produce un cambio de tendencia  de alcista a bajista. 

Un cambio de tendencia no viene determinado, sin embargo, por la primera vez que los  precios fallan al romper un nivel de resistencia, en una tendencia alcista, o un nivel de soporte, en una tendencia bajista, sino que se debe desarrollar completamente una  formación de vuelta de tendencia para poder confirmarlo. 

ZONA DE SOPORTE EN BBVA 

Al igual que ocurre con la línea de canal, en una tendencia alcista los niveles de  resistencia se convierten con frecuencia en niveles de soporte tras ser rotos de forma  significativa, y en una tendencia bajista los niveles de soporte se transforman igualmente  en niveles de resistencia cuando los precios se recuperan hacia ese nivel. La  probabilidad de que los niveles de soporte y resistencia inviertan sus respectivos papeles  depende de tres factores: 

  • Cuanto mayor es el volumen, más inversores tienen interés en ese nivel de precio  y más significativo se vuelve.  

  • Cuanto más tiempo se están negociando los valores del nivel de soporte o  resistencia, la probabilidad de un cambio de tendencia será mayor.  

  • Cuanto más reciente sea el soporte o la resistencia, más fresco estará en la mente  de los inversores y mayor será la probabilidad de que el precio se vuelva a frenar  en tal área.

2.1.3 Modelos de precios: de vuelta y de continuación 

  1. El estudio de estos períodos de transición y sus implicaciones en cuanto a pronósticos  nos lleva a la cuestión de los modelos de precios. En primer lugar, ¿qué son los modelos  de precios? Los modelos o patrones de precio son imágenes o formaciones que  aparecen en los gráficos de precios de valores o productos que se pueden clasificar en  distintas categorías y que tienen valor de predicción. Hay dos categorías principales de modelos de precios: de vuelta y de continuación

  2. Como los nombres indican, los patrones de vuelta anuncian que se está dando un  importante cambio de dirección en la tendencia. Los modelos de continuación, por otro  lado, sugieren que el mercado sólo está en pausa durante poco tiempo, posiblemente  para corregir una condición sobrecomprada o sobrevendida de corta duración, y que  después de la pausa retomará la tendencia actual. La dificultad estriba en distinguir entre  los dos tipos de modelos lo antes posible mientras se esté formando el patrón.

  3. Sin embargo, a pesar de la clasificación de formaciones gráficas que se han efectuado  sobre la base de esta distinción, cabe decir que algunas de las mismas podrían indicar  tanto continuación como vuelta de tendencia, por lo que, en algunas ocasiones, el  analista deberá tener en cuenta otros indicadores técnicos para determinar el desarrollo  futuro del mercado. Además, el precio puede saltarse determinados niveles en su trazado, creando así  huecos o formaciones aisladas de precio, que también contienen información sobre el  comportamiento posterior del mercado. 

  4. El volumen juega un importante papel de confirmación en todos estos modelos de  precios. En momentos de duda (y de éstos hay muchos), el estudio del patrón de  volumen que acompaña la información sobre precios puede ser el factor que decida si se  puede confiar o no en el modelo. La mayoría de los modelos de precios tienen también ciertas técnicas de medida que  ayudan al analista a determinar los objetivos de precios mínimos. Aunque estos objetivos  sólo son una aproximación al tamaño del movimiento siguiente, ayudan al operador a  determinar su ratio de riesgo / beneficio.  

2.2. Formaciones de vuelta 

2.2.1 Reversal day – Outside day 

  1. Un reversal day puede aparecer tanto en un techo como en un suelo. La definición  aceptada más general de un top reversal day es el alcance de un nuevo máximo en una  tendencia al alza, seguida por un cierre menor que el cierre del día anterior, en la misma  sesión. Por su parte un bottom reversal day dibuja un nuevo mínimo durante el día  seguido por un cierre mayor al cierre del día anterior. 

  2. Cuanto mayor sea el rango recorrido por el precio durante la jornada y cuanto mayor el  volumen registrado, más relevante es la señal de un potencial cambio de tendencia. Cuando tanto el máximo como el mínimo registrado por el precio en el reversal day  exceden al rango del día anterior, aparece un outside day.

2.2.2 Cabeza y hombros y cabeza y hombros invertidos 

  1. Es la figura más fiable, pues cuando se completa con éxito ofrece una excelente  indicación de vuelta de tendencia. En primer lugar aparece el hombro izquierdo, un movimiento alcista acompañado de  fuerte volumen y seguido de un retroceso, tanto del precio como de la actividad. En  segundo lugar se forma la cabeza, un movimiento al alza que sobrepasa el techo  marcado por la subida anterior, también con fuerte contracción y seguido de una nueva  corrección que deberá traspasar el máximo alcanzado por el hombro izquierdo. 

  2. Por último  aparece el hombro derecho, una nueva cresta que no debe alcanzar el máximo anterior y  debe ir acompañado, necesariamente, de un volumen más bajo que las anteriores  subidas. La bajada que prosigue debe traspasar la línea que une los suelos de los dos  hombros (línea del cuello o línea clavicular) en un margen decisivo del 3 o 5 por ciento,  para que se confirme el comienzo de una tendencia bajista.

  3. Tras la ruptura de estas figuras, se supone que el precio debe recorrer, al menos, una  distancia igual a la vertical desde el techo (suelo) de la cabeza a la línea del cuello,  proyectada hacia abajo (hacia arriba) desde ésta última. En ocasiones, la formación de cabeza y hombros puede actuar como pauta de  continuación de tendencia, indicando una consolidación y no el fin de un movimiento;  toma entonces la forma de un techo de cabeza, al consolidar una tendencia bajista, y de  una cabeza y hombros invertidos, en una tendencia alcista. 

2.2.3 Techos y suelos redondeados 

Son el resultado de un cambio lento y gradual en el equilibrio oferta-demanda, que  encuentra, de forma bastante simétrica, la dirección opuesta a la anterior tendencia. El volumen desciende durante la primera parte de la pauta, es decir, la que finaliza en el  máximo, si se trata de un techo redondeado, o en el mínimo, si es un suelo redondeado.  Más tarde comienza a subir mientras los precios caen desde la cresta, si es un techo, o  mientras ascienden desde el fondo, si es un suelo. Estas figuras no miden la cantidad de movimiento del precio que se espera en la nueva  dirección. Sirven simplemente para identificar una vuelta en la tendencia, pero casi nunca  engañan. 

2.2.4 Dobles y triples suelos y techos 

  1. Un techo doble consta de dos alzas máximas bastante separadas en el tiempo por un  retroceso significativo de los precios; la segunda de las dos crestas suele formarse con  menos volumen que la primera. El suelo doble tiene las mismas características, a  excepción de que su trasfondo es alcista; el segundo de los dos suelos se forma con  menos volumen que el primero, pero experimenta un incremento importante en la subida  hacia la ruptura al alza. En cuanto a las implicaciones de esta figura, el precio mínimo a alcanzar se calcula  midiendo la distancia entre el alza máxima (baja mínima) y el límite inferior (superior) de  la figura y proyectando esta distancia desde la línea de clavícula. 

  2. Los techos y suelos triples aparecen cuando los precios intentan rebasar tres veces el  anterior máximo (triple cresta) o mínimo (triple valle) sin éxito. En los techos triples, el  volumen suele ser decreciente en cada avance respecto al anterior y en los suelos triples,  suele crecer con cada subida respecto a la anterior. En este gráfico puede apreciarse cómo el precio realiza tres intentos de ruptura de la  línea roja de resistencia, dibujando de esta manera una potencial formación bajista de  triple máximo

2.2.5 Rectángulos 

  1. Son movimientos laterales del precio dentro de dos líneas paralelas horizontales o  ligeramente inclinadas, que actúan como techo y suelo. Representan un conflicto entre  compradores y vendedores que desean realizar sus operaciones a niveles diferentes de  precio, los primeros en el suelo y los segundos en el techo de la figura. No se puede  predecir quién ganará la batalla hasta que una u otra línea se rompa definitivamente, con  lo cual podría ser tanto una figura de vuelta como de consolidación de tendencia. 

  2. Si el volumen es relativamente más alto en los movimientos hacia arriba que en los  movimientos hacia abajo, es más probable que sea la línea superior del rectángulo la que  se rompa. Al contrario, si el volumen es relativamente más alto en los movimientos  decrecientes que en los crecientes, probablemente la ruptura será hacia abajo. En  cualquier caso, el volumen disminuye lentamente a medida que el rectángulo se forma,  hasta sufrir un significativo aumento en el momento de la ruptura. 

2.2.6 Formaciones de ensanchamiento 

Se producen cuando una serie de tres o más fluctuaciones de precios se van  ensanchando entre líneas limítrofes divergentes y simétricas o con un lado horizontal. Por  lo general, aparecen en las últimas fases de un mercado alcista con implicaciones  bajistas. El volumen se mantiene, generalmente, fuerte e irregular durante el desarrollo de la  figura, obteniéndose una confirmación bajista si la actividad crece cuando el precio se  aleja. La distancia que recorrerán los precios tras la vulneración es difícil de determinar, pero se  puede establecer como distancia mínima la existente entre el alza máxima y el límite  inferior proyectada a partir del punto de ruptura. 

2.2.7 Cuñas 

  1. Es una formación en la que las fluctuaciones se producen entre dos líneas convergentes  que se inclinan en la misma dirección. En una cuña ascendente, las dos líneas se mueven hacia arriba y, por tanto, la línea  inferior tiene un ángulo más inclinado que la superior. Tiene implicaciones bajistas, pues  representa una situación de mercado que se hace cada vez más débil, desde una  perspectiva técnica, al irse agotando gradualmente la demanda hasta desaparecer y  provocar una caída importante de los precios. Se puede producir al final de una tendencia  alcista o como recuperación de un mercado bajista. 

  2. En una cuña descendente, las líneas están orientadas hacia abajo y la línea superior  tiene más inclinación que la inferior. Sus implicaciones son alcistas, pues se tratan de una  situación que se va fortaleciendo técnicamente, al ir disminuyendo el interés de venta,  hasta que los precios rompen la línea superior y comienzan a ascender, no sin antes desarrollar un movimiento lateral durante algún tiempo. Al igual que las cuñas  ascendentes, pueden ser formaciones de vuelta o de consolidación de tendencia. Sea cual sea la dirección de la cuña, el volumen debe disminuir gradualmente a medida  que el precio se mueve hacia el vértice de ésta, y finalizar la misma con un aumento en la  ruptura.  En cuanto a las implicaciones de medición de esta pauta, los precios suelen desandar, al  menos, el camino que recorrieron desde el comienzo de la cuña hasta su conclusión. 

2.2.8 Diamante 

Se puede definir como una compleja formación de cabeza y hombros de línea clavicular  en forma de V o como una formación de ensanchamiento que después se convierte en un  triángulo simétrico. Normalmente es una figura de vuelta de tendencia alcista a bajista, pero también puede  ser una formación de consolidación. El volumen aumenta a medida que la figura se va ensanchando y desciende  gradualmente según se vuelve más estrecha, hasta finalmente aumentar en la ruptura. Tras la vulneración, los precios deben moverse, como mínimo, una distancia igual a la  que hay desde el máximo hasta el mínimo de la formación, proyectada desde la ruptura. 

2.2.9 Vuelta en un día 

  1. Es una figura que se completa en un solo día y consiste en que el precio se vuelva de  forma estratégica, cerrando en la dirección contraria a la indicada en la apertura. Existen  vueltas en dos días, vueltas semanales y mensuales (mucho más significativas que las  diarias) y, por último, vueltas de isla, provocadas por huecos en los precios. Normalmente esta formación va acompañada de un volumen inusualmente alto. 

  2. El significado técnico de esta figura es sólo a corto plazo, pero, sin embargo, suele ir  seguida de un cambio importante en la tendencia. Es decir, no lleva consigo  implicaciones inmediatas y de tendencia mayor, sino que avisa sobre la posible formación  de una pauta (cabeza y hombros, triángulo), preparando así al inversor para un probable cambio de tendencia. Normalmente los precios retrocederán, tras el giro, el movimiento  secundario que les precedió. 

2.2.10 Vuelta de isla 

Es una pequeña pauta de precios aislada de la tendencia principal por dos huecos, el  primero de agotamiento y el segundo de separación. No aparece por sí misma como una  formación de vuelta de tendencia primaria, pero se desarrolla, frecuentemente, dentro de  pautas más largas que anuncian un cambio de tendencia importante. Se caracteriza por un volumen relativamente alto. 

2.3. Formaciones de continuación 

Son movimientos laterales de precios que, temporalmente, interrumpen una tendencia  alcista o bajista. Sugieren que el mercado está ascendiendo o descendiendo demasiado  rápido y necesita una pausa a corto plazo para absorber el exceso de compra o venta,  tras lo cual la tendencia existente reanudará su camino.

2.3.1 Triángulo simétrico

  1. Los precios oscilan lateralmente entre dos bandas convergentes y simétricas, hasta que  se produce la ruptura de una de las dos líneas. Normalmente confirman la tendencia  anterior, pero también pueden suponer una vuelta de tendencia. El volumen disminuye a medida que la figura se va formando. Si se produce una ruptura  válida hacia arriba, el volumen debe ser fuerte en ese punto y si se trata de una ruptura  de la línea inferior, el volumen debe ser reducido al principio y aumentar  significativamente tras unos días. 

  2. En cuanto al alcance del movimiento del precio tras la ruptura, si se rompe el límite  superior se espera que los precios asciendan hasta alcanzar una línea trazada de forma  paralela al límite inferior del triángulo desde su alza máxima. Si el precio rompe hacia  abajo, debe descender, al menos, hasta sobrepasar una línea paralela al límite superior  que comience en el mínimo más bajo del triángulo. 

2.3.2 Triángulo rectángulo 

  1. Reciben este nombre porque uno de los dos límites convergentes, que contienen la  fluctuación de precios, se forma con un ángulo de 90 grados, es decir, paralelo al eje de  abscisas. Pueden ser ascendentes o descendentes. En el triángulo ascendente los precios se mueven entre una línea límite horizontal como  techo y una línea límite creciente como suelo, proporcionando una visión alcista; la línea  superior del triángulo representa la existencia de una barra de oferta en un precio  determinado ante una demanda que persiste en compra a un precio más bajo. 

  2. En el triángulo descendente los precios oscilan entre una línea límite decreciente como  techo y una línea límite horizontal como suelo, sugiriendo un futuro bajista; el suelo  horizontal representa una barrera de demanda en un determinado precio inferior al precio  de mercado. La tendencia del volumen es descendente durante la formación de la figura hasta que se  alcanza el punto de "ruptura", en el cual se incrementa de forma importante la actividad. 

2.3.3 Hueco o gap 

Un hueco o gap es un rango de precios en la que no se producen transacciones y deja,  por tanto, un espacio vacío en el gráfico. 

Se produce en una tendencia alcista cuando el precio mínimo de un determinado período  supera el precio máximo del período previo, indicando así fuerza de mercado. Un hueco  en una tendencia bajista tiene lugar cuando el precio máximo de un período es inferior al  precio mínimo del período anterior, manifestándose de este modo la debilidad del  mercado. 

Se pueden diferenciar cuatro tipos significativos de huecos: hueco común, hueco de  separación (o de ruptura), hueco de continuación (o de escape) y hueco de agotamiento.  

Hueco común 

Tiene lugar en mercados de poco volumen de negociación o dentro de una formación de  precios, más frecuentemente de consolidación que de vuelta de tendencia, por lo que  suele ir acompañado de una disminución de volumen. Es el menos significativo de los huecos citados, pues refleja simplemente falta de interés,  sin prácticamente ningún significado predictivo de tendencia, pero puede ayudar a reconocer una pauta de precios. 

Hueco de separación 

Tiene lugar cuando, al completarse una pauta, el precio rompe fuera de la misma,  acompañado de un fuerte volumen creando un vacío, que enfatiza el hecho de que la  figura ha sido auténtica. Señala, por lo general, el comienzo de un movimiento de mercado significativo, que  llevará a los precios más lejos y más deprisa que si la fuga se hubiera producido sin  hueco. 

Hueco de continuación 

Se produce durante movimientos rápidos de precio, tanto alcistas como bajistas,  indicando una fuerte tendencia subyacente en la dirección del movimiento. Suele ir acompañado de un volumen moderado, que acompaña a un precio que se mueve sin  esfuerzo. 

Se espera que los precios recorran, tras el hueco, la misma distancia que existía desde el  comienzo del movimiento hasta el hueco. 

Hueco de agotamiento 

El último tipo de gap aparece cerca del final del movimiento de mercado. Después de que  todos los objetivos se hayan alcanzado y que los otros dos tipos de gaps (de separación  y de continuación) se hayan identificado, el analista debería esperar que apareciese el  gap de agotamiento. Cuando los precios cierran por debajo del último gap, es  normalmente la señal de que el gap de agotamiento ha tenido lugar. Éste es un ejemplo  clásico en el que un gap cubierto en una tendencia al alza tiene implicaciones claramente  bajistas.